Es importante saber de dónde partimos, y para ello, durante este primer día vamos a desenmascarar la base de nuestro sufrimiento.
Nuestra ilusoria identidad está muy afianzada, y es justamente su disolución la que nos conduce a nuestro despertar. La expondremos desde diferentes ángulos, destapando su influjo en nuestro día a día.

Después de haber revisado nuestro lado más oscuro, vamos a dilucidar detalladamente el estado final al que todos estamos abocados.

Al describirlo, lo iremos evocando; y quizás, durante la meditación final, consigas degustarlo plenamente. Haciéndolo tuyo un poco más.

En este día observaremos cómo solemos perseguir placeres pasajeros sin alcanzar verdadera satisfacción.

Resaltaremos la posibilidad de acercarnos a nuestro despertar a través del disfrute de las bondades que nos presenta la vida. Y ensayaremos cómo saborear los deleites diarios con una consciencia que nos acerca a un estado de completa realización.

Todos hemos atravesado momentos de dolor y sufrimiento.

Durante esta sesión diseccionaremos la esencia de nuestros episodios más amargos; y sacaremos a relucir su importancia en la desintegración de nuestra personalidad. Así como la mejor forma de relacionarnos con ellos en pos de nuestra liberación definitiva.

En esta sesión trataremos uno de los principales ingredientes: el vehículo que nos trasladará con seguridad y a buen ritmo a nuestra deseada meta.

Una vez abordado este proceso tan valioso y esencial, desarrollaremos una de sus prácticas más representativas.

Este ingrediente es fundamental para avanzar hacia nuestra iluminación.

Durante esta sesión, revisaremos las implicaciones del perdón y de su opuesto, el rencor. Finalmente, nos daremos una oportunidad para perdonar y sentirnos perdonados.

Conforme nos vamos acercando a nuestro máximo potencial, nuestra creatividad también comienza a desatarse, dando paso a nuestra expresión más auténtica y fructífera.
Al mismo tiempo, nuestra creatividad se relaciona con la posibilidad de materializar aquello que necesitamos. Durante los últimos minutos, realizaremos una visualización creativa tan sobria como profunda.

Durante esta sesión, aclararemos cuál es nuestra principal vocación. Así como la posibilidad de emplearte en aquellas labores donde puedes desarrollar tus dones; generando una aportación personal única.

Finalmente, desarrollaremos una meditación para conectarnos con esta afortunada situación a través de las sensaciones que de ella se destilan.

“Es de bien nacido ser agradecido”. Nuestro progreso personal va de la mano con nuestro sentimiento de gratitud. Por ello, durante este día vamos a escudriñar esta emoción, para poco a poco ir evocándola.

A lo mejor, al final de esta sesión te encuentras en completa sintonía con tu Realidad.

La sensación de unidad es una de las más reconocidas a la hora de describir un despertar.

Durante esta última sesión indagaremos en esta experiencia, sumergiéndonos en ella durante nuestra última meditación.